Un tiempo después de recibirme de licenciado en ciencias políticas, tal vez estando ya en el seminario, me di cuenta de que lo que realmente me gustaba de la política era eses espejo de dinámicas humanas. La política como una gran metáfora de lo que somos, de lo que sentimos, de lo que deseamos . Así me gusta ver la política: aunque pueda pecar de naive , me gusta ver la humanidad. Tal vez sea deformación profesional: lo auténticamente humano deja ver lo divino . Yendo al grano. El caso de las vacunas VIP nos vuelve a enrostrar la torpeza de nuestra clase gobernante. Torpeza que por cantidad bien podrían calificarse de otro modo. Torpeza que se parece mucho a los beneficios de los amigos del poder del gobierno pasado. Algunos le dicen corrupción y Sartori les daría la razón. Cada hecho nos frustra y golpea la alicaída confianza en la clase gobernante . Para los fanáticos es tan fuerte que obliga a unos vericuetos lingüísticos notables para disimular. Se multiplica la indignación (est
Un lugar nada común en el mundo con pensamientos propios lejos de modelos, modos de acción, universales y rutinas impuestas. Un lugar en el mundo de libertad y expresión. Un lugar en el mundo para la originalidad. Sin pretensiones de ser el mundo, tan solo un lugar para estar.